lunes, 18 de junio de 2012

PLACERES DEL SEXO 
EN HISTORIAS REALES 
Y EN FANTASÍAS PENSADAS
En esta oportunidad le presentamos una variedad de temas y vídeos, todo para que encuentren lo que buscan. El Hentai, las fantasías de muchos y muchas, el relato de una chica desesperada por entregarse a un desconocido, la inquietud de una joven panameña presionada por su novio para que se entregue al sexo anal y las respuestas de varios lectores que han querido ayudarla dándole consejos, pero también disfrutarán de Yadira, una caraqueña que además del consejo envía un vídeo para motivar a nuestra amiga de Panamá. Y por si fuera poco una pereja española se deja grabar en escenas íntimas para ayudarse a solventar la crisis económica que vive España...y en ese mismo orden de búsqueda de dinero una venezolana de nombre Fernanda, hace algo similar y se deja penetrar con gusto. Al final Yalta, una espectacular joven rusa, nos ofrece encabtadoras fotografías para el deleite de chicos y chicas. Para terminar, Kendra, a pedido de los lectores de este blog, repetimos sus vídeos cuando aún no era famosa. Por ahora los dejo con un vídeo de introducción...y después Sasha Blonde, bailando y entregando el cuerpo!!

 Sasha baila primero y se entrega después

Una de las páginas más buscadas por los internautas interesados e interasadas en ver y disfrutar sexo, son las de la animación hentai. Una fórmula japonesa que muestra la variedad de situaciones posibles en las realidades y fantasías del placer de la carne íntima en todo su esplendendor. Y como ya hemos escrito en entregas anteriores, hay un morboso placer al disfrutar de estas animaciones. Aquí tienen una muestra.

Entre locuras y gemidos

 El sexo Hentai: perversión deseada

 Esos momentos que se buscan y que luego no se pueden olvidar

El siguiente relato es un testimonio fiel de esos momentos de locura que a veces asaltan la mente de hombres y mujeres y que se relacionan con los instintos profundos del placer del sexo, pero que un día, por aquello de atravesar la frontera de lo prohíbido socialmente o de aquello tachado de tabú, se presenta como una única oportunidad de vivirlo. Este es el caso de Analuisa Obregón, una joven común que cierto día decidió ver, si mostrando sus encantos de mujer, un desconocido la podía poseer sin que quedará rastros de él, solo el recuerdo de la lujuria. Un recuerdo que cada vez que vuelve  su mente provoca que sus labios íntimos se empapen de sus jugos de hembra pura. El relato de Analuisa lo envió a nuestro correo, conjuntamente con una fotografía, disfruten entonces de su momento inolvidable...

"Era una tarde y me apetecía tener un miembro en mis hoyos; he de decir que si bien no me faltan los buenos penes para coger, digamos que las mismos aburren  por lo que esa tarde salí con la firme intención de encontrarme una nuevo, que me bajara lo zorra  que estaba. Decidí firmemente en llegar a un café y esperar a que alguien respondiera a mis flirteos  evidentes. Llegué pues a este lugar, y me senté en una mesa arrinconada al fondo, en el área de no fumadores, no sin antes haberme paseado y contoneado mi culo por las demás mesas, logrando que los hombres  presentes voltearan a verme la falda y las nalgas salientes.
Mi culo es algo que me agrada y agrada a los que lo han cogido, mis tetas son duras y generalmente no llevo sostén con el afán de que bailen y se muevan coqueteando con cualquiera que las vea. En fin, llegué a la mesa que me había gustado y me senté. Comencé a ordenar mientras un chico  que estaba en la mesa contigua se que quedaba viendo. Aproveché para mostrar más mis tetas y abrirme de piernas con el propósito de que me viera la panty, o como dicen las españolas, las bragas.
Comencé a mojarme, me encanta que me miren, me levanté al sanitario y dentro, me quité la diminuta prenda íntima para dejar  visible  mi coño; regresé a la mesa y abrí mis piernas otra vez. El chico  se tocó el paquete cuando notó que no llevaba la tanga que me cubría anteriormente. Al ver su reacción no puede evitar  mojarme otra vez. De repente, el joven  se paró y se dirigió hacia mí; llegó donde estaba y me dijo al oído "mira, voy al servicio de baños  y te espero adentro, no tardes"
Dicho esto, se dirigió rumbo al sanitario de hombres, y yo me quedé sentada, viendo como se iba, y yo con ganas. Esperé un poco, y me dirigí al servicio y apenas entré sentí cómo me tomó por la cintura y me sacó la blusa. Me tocaba  mis tetas una y otra vez mientras gemía al tacto de sus manos sobre ellas. Busqué su paquete y toqué su tieso pene, era delicioso, grande y grueso. Me tomó del pelo.
-Vamos  zorra, se la vas a mamar a tu amo Andrés  hasta los huevos, ¿entendiste perra?
-Sí, ok  hasta los cojones!!
-Bien,  puta, ¿qué esperas entonces?
Tomé la polla y la comencé a morder en la punta, pasé mi legua de puta desde la cabeza hasta los  testículos, rodeándolos de saliva una y otra vez; la verga comenzó a despertar, lucía deslumbrante parada. Empezó a empujar mi cabeza contra su miembro  metiéndomelo hasta la garganta; yo solo gemía en cada metida de verga, me ahogaba pero el placer era tremendo, el morbo de hacerlo en un baño público a un desconocido  y que alguien entrara y nos viera, iba en aumento. Succionaba duro y fuerte su polla, la apretaba con  mi boca. Mamé su miembro y lamí toda su extensión  hasta el ojete, no dejaba de mirarlo, mientras me decía lo sucia que era. Ese estado de sumisión, sentirme dominada, me volvía loca de placer.  
Me arremetió contra los lavabos y me puso de espaldas a él; me subió la falda que llevaba y quedó abierto mi culo; comenzó a meterme los dedos mientras lamía mi coño mojado;  gemí y grité, de seguro se escuchó afuera, pero no me importaba. Mientras metía sus dedos me lamía la oreja y apretaba con su mano libre mis tetas. Entonces comenzó a meterme la punta de su pene en mi culo.
Era enorme, solo llevaba la punta y me dolía el culo, me ardía mientras entraba para ajustarse, pero guardé silencio para no alarmar a quienes podían escuchar, le pedía,  le imploraba que se detuviera pero no me hacía caso, solo jalaba mi cabello y metía más y más su miembro en mi culo. Yo gritaba de dolor, toques eléctricos recorrían mi cuerpo mientras su pene  avanzaba y rompía las paredes de mi culo. Sentía como si un palo de madera se adentraba en mis entrañas, sentí, por instantes que le ensuciaría su pene, pues unas ganas inmensas de defecar se me vinieron. Entonces me relajé, mi esfínter fue cediendo y se dilató, mi culo le pertenecía hasta el fondo. Ya no había dolor…puro placer.
-Anda putica, no te hagas la estrecha, abre tu culo puta anda
-No, para por favor, no sigas…por favor suéltame!!!
-Me prendiste puta, así que ahora te aguantas, anda bebita mueve ese culo, eso te mereces por zorra. Tú querías que te castigaran…
Metió toda su miembro  y quedó inmóvil, la sensación que antes era dolor empezó a convertirse en placer, abrí mi culo e inconscientemente comencé a moverlo, con  su macana  abriéndome el ano; él comenzó el mete y saca semilento, hincándomelo  duro y fuerte, sentía el sonido de mis nalgas al chocar con sus muslos, me excitaba creer que eran aplausos por lo cerdita que era.  Comencé a gemir como perra ensartada, cada vez que sentía sus bolas  golpear mis nalgas pedía más y más. No lo podía controlar, sus manos se posaron en mis nalgas y empezó a cogerme frenéticamente el culo. Sólo se escuchaban  esos sonidos típicos de las nalgas putas  y sus piernas y mis gemidos, mis jadeos de placer…
Por el espejo veía cómo su arma me partía el culo el dos y yo disfrutándolo como nunca. Deseaba ser usada por Andrés,  hasta que mi culo  no diera más. Me entregué a su pene  como nunca, se deslizaba dentro de mi ano como perro dentro de una perra. Más y más rápido, sentía cómo mi orgasmo me llenaba, era demasiado placer. Me imaginaba que pronto vaciaría su leche en mi profundo culo.Pero no, no acabó en mi culo.
Sacó su miembro de mi culo y me volteó frente a él. Me lamía y chupaba las tetas mientras yo luchaba por apretarle el pene  con mis manos. Subió mis piernas en sus hombros y apunto su verga a mi coño. Todavía se veían restos de mierda y corrida en su p pero no le importaba. Le rogué que me dejara limpiarle la polla pero se negó
-Tu coño va a probar tu mierda zorra, vas a ver cómo te la voy a enchufar, no vas a poder cerrar tus piernas en una semana…me perteneces…
-Deja, por favor –  pero no hizo caso y me la enchufó todo y di un grito.
-Para puta, ¿quieres que el restaurante entero se dé cuenta que eres una “busca machos”?
-Ahhhhhh, mmm no para ahhhhhhh
-No voy a parar , gime anda gime…y dime tu nombre, vamos
- Lo que tú digas…Ok. Me llamo Analuisa y soy tuya!!!
Apretaba mi coño con su miembro dentro, sus estocadas eran fuerte, duras, sentía como mi coño se agrandaba para darle paso a tu polla caliente; noté que entró un muchacho al servicio y al vernos coger se quedo mirándonos, pero no me importaba ya nada. Yo recuerdo solo seguir pidiendo más y más polla en el coño, no paraba de gritar, de menearme con  cada  jodida de verga que recibía en mi vagina. Comenzó a aumentar el ritmo de la cogida, quería darme su leche en mi cara. Sacó su verga y la puso frente a mí y la succioné. Comencé a sentir los espasmos de su cintura y  lo empujé hacía atrás para sacarme el pene de la boca, pues no quería tomarme la leche y su leche salía, abundante y un primer chorro apuntó a mi cara, cerre los ojos y aspiré ese olor a semen, olor a hombre, luego de unos segundos un hilo de leche se deslizó por mis labios, mientras él, Andrés, me pedía que la probara, saqué la punta de mi lengua y la paseé por mis labios, y la sentí rica en mi boca. Tragué lo que pude, era una gran corrida, sin que él me lo pidiera, lamí lo que cayó al piso, estaba en cuatro patas, con la falda a la cintura y sin blusa…así como quería sentirme, lamiendo su leche del piso, despeinada, sudada…, con mis orificios aún palpitantes y mientras yo hacía eso, él se ajustaba los pantalones y salía del baño diciéndome: “Analuisa, disculpa lo brusco que fui, pero sé que era una fantasía para ti y también para mí, no olvidaré este día…”  Entonces invitó al chico que había entrado a que me  mamara  el coño, mientras él  se marchaba. Pero ya era suficiente para mí. Mientras yo me vestía y me arreglaba el cabello, ese otro chico me miró y sonrió en agradecimiento por lo que había visto.
Más nunca volví a ese sitio, ni sola, ni acompañada, la vergüenza había tomado control de mí por lo que hice. Pero jamás olvidaré a ese hombre…jamás."

Y hablando de recuerdos

Un tema recurrente entre parejas es el sexo anal y ya se ha tratado bastante en estas páginas, pero seguirá siendo "un clásico". Así que aquí tienen algunas inquietudes de nuestros lectores y algunas sugerencias también.

De Panamá nos escribe Allison Torres, de 25 años.

"Tengo una duda, yo considero el sexo anal un poco algo fuera de lo común, pero desde hace meses mi novio me tira indirectas de que quiere practicarlo ....es algo fuera de común de lo que uno se pueda avergonzar? Ayudita, please."

Pues ella recibió algunos mensajes:

Caracas, Venezuela. Pedro Martínez, de 32 años.

"¿Por detrás? Huy, que cochinada, no? ajajajaja, no te rayes, prueba, por qué no? Avergonzarte? por qué? si te apetece, y a él también, no hay problema."

De Córdoba, Argentina. Patricia Blasini, de 27 años.

"En el sexo todo es permitido, siempre y cuando ambos estén de acuerdo, no te tienes que sentir avergonzada, cuando estes preparada, tú misma sentirás que estás lista para hacerlo, inténtalo poco a poco, sin preciones y descubrirás por ti misma si te gustaria volver hacerlo o no, tampoco es una cosa del otro mundo, pero tiene su curiosidad y a los hombres por alguna razón les gusta mucho, Buenasuerte amiga."


DF, México. Ana Belén Montesinos, 31 años.

"Trata de que si te lo hace  mover el culito, en movimientos circulares, mientras se entra y sale lentamente. , tensa y afloja para acariciar el pene. Sabrás si te estás moviendo en la mejor manera porque sentirás un flujo rítmico y apasionado. Olvidarás dónde estás mientras los movimientos los hacen fundirse en uno solo.ni es malo, ni mucho menos, además existe una extrema sensación de ser dominada por él y eso excita."

Caracas, Venezuela. Yadira Albornoz, de 28 años.

"Amiga todas las mujeres, menos las monjas, pasamos por esa solicitud de parte de los hombres. Todos nos piden el c... y dicen que sienten más placer porque el recto es más estrecho y les presiona más el pene y dicen que se excitan al ver cómo sufrimos un poco. Y la verdad se sufre, pero se disfruta si estás excitada. Sentir que nos tienen "tomada" por allí es indescriptible. El sexo es sexo. Yo lo practico, no es en cada relación que tengo, pero el trasero mío forma parte de mis relaciones íntimas, si no es con la penetración del pene, es con sus dedos, sus toques o su lengua. Recién hice un vídeo con mi novio para una página porno de mi país...y disfruto al verme así. Ese vídeo lo he enviado al blog Cuentos de Pura Piel, si lo ponen, espero que te sirva de motivación."

Y efectivamente, aquí mostramos a este hermosa caraqueña dándose placer por detrás. Sensaciones de lujuria sin límites y sin tabú.

Yadira se entrega al sexo anal...
Se dejan grabar para buscar un dinerito
 
Cristina y su novio deciden dejar ver sus partes íntimas en plena acción a través de un vídeo que una casa productora de escenas porno en España hace y paga muy bien. Ellos jóvenes de 18 años y en plena crisis económica española, no tienen mayor problema en que el mundo los vea. Al principio un poco de verguenza en la entrevista, pero luego se dedicaron a pensar que estaban solos y dieron rienda suelta al placer de cogerse. Y en la misma onda, Fernanda una venezolana osada, se entrega a dos placeres al mismo tiempo, dejarse grabar para ser vista y follar rico. Aquí la tienen!!


Fernanda: "Si me pagan bien, me dejo"

Y ella es Yalta, una joven rusa, traviesa y provocadora
Yalta y sus amigas en la Eurocopa 2012
Mientras miles de fanáticos del fútbol se dedican a esperar que las selecciones de sus países lleguen a cuartos de final, otros milies llegan al final del cuarto para ver sexo en internet y encontratr a Yalta mostrando sus encantos. Aquí la tienen!!!

Y ahora...otra vez Kendra, la chica PlayBoy, cuando aún no era famosa, pero ya disfrutaba el sexo a todo placer
Sí, porque hubo una época en que Kendra Wilkinson no era tan famosa, ni se había inflado las tetas y ya estaba frente a cámaras caseras dándose duro en sus partes íntimas con su pareja de entonces y bailando toda su hermosa humanidad. Por cierto, hemos modernizado la música para traerla más cerca de estos tiempos. Así que a gozar a Kendra, aunque sea en vídeo!!

Así que espero que hayan disfrutado y recuerden si desean enviar sugerencias y comentarios, pueden hacerlo a través de luisalbertplus@hotmail.com  o luisalbert.blogs1@facebook.com. No olviden visitar Aquellos Seres que Vuelven, un blog de entrevistas imaginarias a personajes famosos...Bye